Bocados salados

He querido probar con algo salado con apariencia dulce y aquí os dejo mi primer cupcake salado aunque no lo calificaría yo de cupcake pero bueno, si le llamo magdalena tampoco es así que me quedo con cupcake.

Es una receta sencilla pero da buen resultado, y para un picoteo queda genial y cambiamos las típicas aceitunas y papas por algo más original. 

Si alguien lo prueba que ponga un comentario porque me encantaría tener otras opciones, otras combinaciones, en fin que todos podamos experimentar para mejorar la receta.

INGREDIENTES (para 12 cupcakes de tamaño mediano)

250 gr de harina de trigo
1 cucharadita (de café) y media de levadura en polvo (tipo Royal)
1/2 cucharadita de sal
250 ml de leche a temperatura ambiente
1 huevo tamaño L (mediano) (sacado de la nevera al menos una hora antes)
70 ml de aceite de oliva suave
50 gr de queso rallado (yo utilizo emmental suizo que es el que gusta en casa)
50 gr de fiambre de pechuga de pavo (lonchas finas muy troceadas)
6 Aceitunas negras aliñadas (tipo griego)
Una pizca de orégano
Mermelada de cebolla (la compro en la frutería de mi barrio pero en cuanto tenga un rato os pongo la receta)


PREPARACIÓN

Ponemos el horno a precalentar a 200º.

Tamizamos en un bol la harina. Añadimos la levadura, la sal, el queso rallado, el fiambre de pechuga de pavo, las aceitunas cortadas en trozos pequeños y removemos para que se unifique.

En otro bol ponemos la leche y el aceite, batimos y cuando esté todo unido se añade el huevo.

Vertemos en el bol de la leche la mezcla de la harina en 3 veces moviendo las varillas sin mucha fuerza o bien con una espátula para mezclar todo sin que se rompan.

Se preparan los moldes para cupcakes (*) embadurnando con aceite y se llenan con la mezcla hasta 3/4 partes de su altura.

Se meten en el horno y se dejan durante aproximadamente 20 minutos ( o hasta que estén dorados por encima y al pinchar con un palillo éste salga limpio).

Se sacan del horno y se dejan reposar durante 5 o 10 minutos dentro del molde, después se sacan y se dejan sobre una rejilla hasta que se enfríen.

Se pintan por encima con la mermelada de cebolla y listos para servir.

Recién hechos están de vicio pero al día siguiente también "me saben a gloria" jejeje.

(*) Respecto a los moldes no es necesario comprar moldes de cupcakes profesionales (esas bandejas que tienen 6 o 12 agujeros para meter la masa) porque salen un poco caros, si queréis se puede hacer con las flaneras desechables que venden en cualquier supermercado y luego se ponen en las blondas de magdalena para servirlas.